Pues nada, Alvaro vendía su equipo, a Miguel le valía, lo probó...
Y se "enganchó"... bienvenido al club de los "palilleros de montaña", Miguel!!!
P.D. Perdonad por la calidad de las fotos, pero es que las pilas de la cámara me dejaron colgado y había que inmortalizar este importante momento de alguna forma así que tiré de móvil y salió lo que salió... pero que más se le puede pedir a un trasto que está hecho pa llamar por teléfono, ja, ja, ja...
¡Saludos Esgalleros! =D
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